Agustina Lopez es la creadora de la cuenta Pasaje en mano, desde la cual comparte fotos, videos y tips para viajeros. Su trabajo la lleva a viajar constantemente pero, nos cuenta, el supuesto “trabajo ideal” también tiene su lado B.
Para los que nos gusta viajar ver la cuenta de Instagram de Agus (@pasaje.en.mano), es un deleite. Miles de fotos y videos de muchísimos lugares y unas descripciones que nos hacen sentir que estamos ahí.
Pasaje en mano nació en el Mundial de Fútbol de Rusia 2018 como una forma de aunar las grandes pasiones de Agustina Lopez (cordobesa – 30 años): leer, escribir, viajar y las redes sociales. “Hoy es un lugar donde comparto tips, videos y fotos de mis experiencias por Argentina, Córdoba y el mundo para inspirar, enseñar, motivar y para ayudar a esta comunidad viajera a viajar”, asegura sobre su creación.
Agustina es licenciada en Comunicación Social, community manager y periodista profesional a quien el tiempo la fue “especializando en periodismo de viajes”, según ella misma reconoce.
El camino recorrido
Con respecto a los inicios de Pasaje en Mano, Agus nos cuenta: “lo empecé como un juego y después comencé a ver que este juego ya me ocupaba hasta el 80 % de mi tiempo”. Es ahí donde empezó a pensar (y organizar) a Pasaje en Mano como un trabajo.
“Yo ya viajaba antes, había viajado un montón y sigo viajando por mi cuenta también. Yo no me hice el Instagram para viajar gratis. Mucha gente me escribe para preguntarme cómo pueden hacer para la inviten a los viajes. La realidad es que sí me invitan pero hay un laburo previo. Yo viajaba a lo loco, entonces ya tenía contenido para hacer. Hasta que me llegaron a invitar pasó un montón de tiempo, tuve que hacer muchos sacrificios”, relata.
Además agrega que para que esto sucediera tuvo que demostrar que era buena transmitiendo los viajes que hacía.
Luego llegó la hora de encarar esta actividad como un trabajo. “Hay un momento en el que tenés que tomar decisiones”, explica, “yo cree un medio digital, una comunidad de viajes, mi espacio, entonces sí da gusto que la gente te lo tome como algo profesional”.
El secreto del éxito
Cuando Agustina comenzó Pasaje en Mano se planteó la inquietud de buscar un rasgo que la diferencie de otros productos similares. La respuesta la encontró justo algo que la caracteriza: “yo soy muy cordobesa”, dice.
Desde su identidad cordobesa y su tonada, comenzó a mostrar los lugares que visitaba y la gente comenzó a empatizar con eso.
El crecimiento de Pasaje en Mano lo adjudica a que mantuvo su autenticidad, los mismos valores y que siempre su fin fue ayudar a los viajeros. “En los viajes todos estaban durmiendo y yo me quedaba 3 horas editando las fotos, porque yo me decía ‘las tengo que subir, tengo que darles información’. Y eso desde el principio que tenía solo 2 mil seguidores”, cuenta.
“No es una casualidad, es una causalidad lo que me pasó con Pasaje en Mano. Yo respeté en todo momento lo que me plantee”, afirma.
El lado B
Lo que hace Agus parece ser el trabajo soñado para cualquier amante de los viajes, pero ella nos cuenta que, como en todos los casos, tiene sus pro y sus contra.
“Me cruzo con gente que me dice: ‘Agus que envidia’ y yo por ahí les digo: ‘estoy agotada, quiero dormir en mi cama, estar con mi novio, con mi familia’. A veces uno dice ‘que linda, la vida ideal’ pero en realidad dejas muchas cosas de lado”, relata.
A pesar de que le encanta viajar, Agus reconoce que a veces necesita parar, estar un tiempo en su casa (Córdoba), donde puede bajar un poco las exigencias que se impone cuando viaja para mostrar todo lo que quiere mostrarles a sus seguidores.
La pandemia
Los viajeros vieron muy limitada su actividad por la pandemia, pero Agustina cuenta cómo sorteó este obstáculo: “creo que todos se reinventaron y yo también. Todo el tiempo que estuve quieta fui diciendo: ‘voy a recorrer Argentina’. Yo me iba mucho del país. Fui 8 veces a Europa sin embargo no conocía el Sur. Así que me puse la pilas y organicé todo. Desde que nos abrieron en diciembre fui a Ushuaia, El Calafate, El Chaltén, Bariloche, Villa La Angostura, San Martin de los Andes, Mendoza y muchos más. Además recorrí Córdoba y fui a lugares a los que parecía increíble que no hubiera ido nunca en mi vida como Mina Clavero. Me tomé el trabajo de recorrer Córdoba y es inmensa, no se si algún día la voy a terminar de recorrer. Fui a muchos sitios que tenía pendientes”.
Además del impulso por conocer su país, la pandemia le está dejando otras lecciones a Agus. “Uno planifica los viajes para un futuro más lejano y la pandemia nos enseño que no hay que planificar tanto, no hay que planificar tan lejos. Si querés hacer ese viaje, conocer ese lugar, ir a comer a algún lado cerca, hacelo apenas puedas. No tenemos que dejar tanto para después porque no sabemos qué va a pasar”.
Un poco más sobre Agus…
- ¿Qué destino te falta? Bali (Indonesia) “Sueño con ir ahí”.
- ¿Cuál lugar te deslumbró más? “A mi todos los lugares me deslumbran. Los muestro desde esa sensación y la gente me dice ‘ah! nunca me lo imagine tan lindo’. Intento que lo que yo veo traspase la pantalla y que vean el lugar como yo lo estoy viendo”.
- ¿Una ciudad preferida? “Amo Madrid con toda mi alma. Soy muy fan es un lugar donde viviría”.