Hay algunos alimentos que normalmente comemos calientes pero que, debido a cambios en su estructura al perder temperatura, es mejor que los comamos fríos. Te contamos cuáles son.
Durante la cocción se producen cambios fisicoquímicos en los alimentos y lo mismo pasa cuando los enfriamos.
En los productos ricos en almidón sucede que este componente se convierte en lo que se conoce como almidón resistente, que actúa de forma similar a la fibra soluble.
Este tipo de almidón tiene un índice glucémico más bajo, por lo cual el organismo lo absorberá más lentamente, tendremos mayor sensación de saciedad y nos dará una carga calórica más baja.
Diversos estudios han confirmado que los alimentos que te contamos a continuación son más saludables si los consumimos fríos que calientes.
Papas
Esta hortaliza es rica en almidón. La forma más común en que la consumimos es en puré, al horno, fritas o en tortillas
Sin embargo, un estudio de la Journal of American Dietetic Association, indica que lo mejor es comerlas cocidas y frías, ya que esto reduce su índice glucémico y nos da más saciedad.
Es por ello que una buena opción para es prepararlas en ensalada.
Otros estudios recomiendan que es preferible consumirlas hervidas, enfriadas y no trituradas.
Pasta
Las pastas elaboradas con harina blanca refinada son un alimento que debemos comer en forma moderada. Pero su comportamiento post enfriamiento es similar a lo que te contamos de las papas.
Es por ello que, en caso de no optar por pasta integral, lo mejor será consumirla fría. De esta forma incorporaremos a nuestro cuerpo almidón resistente que podremos digerir mejor y que no nos generará una veloz elevación de la glucosa en sangre.
Una preparación indicada para esto son las ensaladas de pasta.
Arroz
Al igual que los alimentos que ya detallamos, el arroz es un cereal rico en almidón y se comporta de la misma manera. Así que también será ideal comernos una buena ensalada en base a arroz frío.
Maíz
Tanto si lo incorporamos como harina, en grano o en su mazorca, siempre será más saludable comerlo frío.
El almidón resistente será beneficiosos para las bacterias de nuestro intestino y nos ayudará a mantenernos más sanos. Este componente es un probiótico de gran valor que nos puede ayudar a controlar enfermedades como la obesidad y la diabetes.
Podemos prepararlo de distintas maneras, pero será bueno evitar los ultraprocesados elaborados en base a maíz como los snacks o los cereales de desayuno, por su alto contenido de azúcar.
Legumbres
Estos alimentos también nos aportan almidón resistente al cocinarlas y luego enfriarlas. Esto sumado al importante aporte de fibra que nos brindan normalmente.
Las opciones para comer legumbres frías son ensaladas, hummus, entre otras.
Los especialistas en nutrición recomiendan consumir legumbres entre tres y cuatro veces por semana acompañadas de otros alimentos.
La ciencia nos ayuda cada día más a conocer nuestro cuerpo y su comportamiento frente a los alimentos y nos indica las mejores formas de alimentarnos para estar saludables.