Nuestra cara posee músculos como todo el resto de nuestro cuerpo, pero éstos suelen ser los grandes olvidados a la hora de ejercitarlos. El Yoga Facial propone una serie de ejercicios que ayudarán a mejorar el aspecto de nuestro rostro y de nuestra piel.
Para mantenernos sanos y en forma vamos al gimnasio y ¿qué tal si ejercitamos los músculos de la cara como los del resto del cuerpo? Esto es lo que nos propone el Yoga Facial, una técnica que nos ayuda a fortalecer los músculos de nuestro rostro.
¿Y qué ganamos con eso? ¡Mucho! Menos arrugas, mayor tonicidad, piel más luminosa, eliminar ojeras y ¡más!
La primera vez que se mencionó esta técnica fue en un libro de Yoga del año 1983, pero su auge recién despegó hace unos años de la mano de la tendencia por el cuidado (exterior e interior) y de la adopción de este método por algunas de las más reconocidas figuras de la música y la actuación a nivel mundial.
Por lo general los ejercicios se indican acompañados de automasaje y de respiración consciente y adecuada.
Las claves para realizarlo
Los especialistas destacan la importancia de que trabajemos los músculos faciales en conjunto (desde el cuello hasta la frente). Es decir, no hacer ejercicios para algunas partes de la cara (labios, ojos, pómulos, etc.) sino trabajar todas las partes porque si no de este modo estaríamos tonificando la parte que nos interesa y “arrugando” la que no trabajamos.
También es importante el descanso por lo cual, algunos profesionales no aconsejan hacerlo todos los días. Sugieren ejercitaciones de entre 10 y 15 minutos 4 días a la semana. En otros casos se indican rutinas de 5 minutos diarios.
¿Quién lo puede hacer?
Cualquiera.
¿Desde qué edad?
¡Cuanto antes se empiece mejor!
¿En qué momento del día se realiza?
A cualquier hora. Es más adecuado si se hace luego de la rutina de skincare cuando la piel está bien hidratada.
¿Qué elementos se utilizan para hacer Yoga Facial?
Esta técnica se realiza mediante muecas, ejercicios y masajes. En algunos casos se recurre a elementos que ayudan a realizar estos últimos.
El Rodillo de jade y Gua Sha son herramientas útiles para potenciar los resultados del yoga facial, pero su uso por sí solo no logra la tonificación del músculo.
Beneficios
Con la práctica de esta disciplina podremos esculpir pómulos y mandíbula, mejorar la flacidez y la calidad de la piel. También nos ayudará a renovar nuestra mirada, luciendo más fresca y sin cansancio.
No solo los músculos se beneficiarán. Nuestra piel lucirá más luminosa, tendremos menos ojeras y se marcará mejor el contorno de la cara.
El yoga facial activa la microcirculación y estimula la producción de colágeno y elastina. Nos ayuda a deshincharnos gracias la activación de la circulación y el drenaje.
Nos da mayor firmeza y tiene un efecto lifting, gracias a la mejor producción de colágeno y elastina.
Los músculos se fortalecen y ganan volumen, lo cual deriva en una piel más tersa.
Ayuda a eliminar la papada, eleva los párpados y abre la mirada.
La piel se vuelve más luminosa y con un tono más uniforme.
La comisura de los labios se eleva y se reducen y previenen arrugas.
¡Con todos estos beneficios ya nos dan ganas de empezar a ejercitar!
