Esa ropa que ya no te gusta, que pasó de moda o que no te entra, no tiene porqué ir a la basura o seguir ocupando lugar en tu armario. Con un poco de imaginación y creatividad pueden convertirse en otros objetos o en una nueva vestimenta.
Cada vez tenemos más conciencia sobre el cuidado del medio ambiente y en indumentaria la tendencia de “usar y tirar” poco a poco va siendo cuestionada.
Para darle un nuevo uso a esa ropa que ya no utilizás te damos algunas ideas de cosas que podemos crear nosotras mismas o algunas acciones para que no se conviertan en residuos.
- Accesorios: bufandas (con flecos, infinitas o tipo pashmina), collares, pulseras trenzadas (a las que se le pueden agregar cuentas de madera u otras), bolsos y carteras, cinturones trenzados… Internet es una fuente inagotable de ideas y si buscás un poco te vas a sorprender con lo que vas a ver.
Complementos para nuestra casa: tejiendo tiras de tela de una remera que ya no usamos podemos crear alfombras, cestos, fundas para almohadones (que también podemos hacer cosidas cuando se trata de otro tipo de tela), tapices y hasta camas para nuestras mascotas. Otras opciones son lámparas con tiras, borlas, pompones y otros objetos que pueden dar un hermoso detalle a nuestra deco. Las telas más desgastadas o que nos gusten menos puede ser un buen relleno para almohadones.
- Juguetes: las medias que ya perdieron su compañera pueden convertirse en coloridos títeres o pequeños muñecos. Entretenimientos similares podemos hacer con cualquier tipo de prenda que tengamos en desuso. ¡Hasta podemos crear un muñeco como los de peluche!
- Nuevas prendas: ese jean que crees que ya pasó de moda, puede volver a la vida con tan sólo unos cortes de tijera. Convertilo en short o bien agregale apliques, tachas, bordados, pintura o lo que te imagines. Vas a ver que no será el mismo.
Lo mismo podemos hacer con remeras básicas. Unos parches termoadhesivos pueden cambiar por completo su aspecto. Podemos también agregar flecos, puntillas o pompones en ruedos, en el remate de las mangas, charreteras en los hombros… ¡A poner la creatividad en acción (visitar la mercería y ver las miles de opciones disponibles será una gran inspiración)!
- Donar, intercambiar o llevar a tiendas de segunda mano: si las prendas están en buen estado y la costura o manualidades no es lo tuyo siempre existe la posibilidad de donarlas, pasarlas a familiares o amigos, intercambiarlas o venderlas en negocios de segunda mano. Este tipo de comercios ha tenido un gran crecimiento en los últimos años y seguro tenés uno cerca.
Nada se pierde, todo se transforma… ¡y el planeta lo va a agradecer!