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Epigenética: la influencia del ambiente

En general pensamos que lo que viene en nuestro ADN es tal como se nos dio y que no podemos cambiar nada. En parte es así porque heredamos nuestra información genética de nuestros padres, pero la manera en que ésta se expresa puede cambiar de acuerdo a condiciones ambientales. Es ahí donde se empieza a hablar de epigenética.

El término epigenética significa “lo que está sobre los genes” y resume un campo de estudio sobre los cambios hereditarios causados por la activación y desactivación de los genes sin ningún cambio en la secuencia de ADN.

Pero, ¿qué significa esto en realidad?

Significa que frente a una misma secuencia de ADN pueden existir diferentes expresiones de los mismos según el entorno al que la persona esté expuesta.

Gracias a los conocimientos sobre el genoma humano se pueden detectar modificaciones en la secuencia de ciertos genes que son las responsables de muchas enfermedades. Pero la salud física y mental no depende únicamente de las modificaciones en el código del ADN propias o heredadas, sino también de la interacción dinámica entre nuestros genes y el ambiente.

Un experimento muy citado para explicar este concepto es uno donde se identificaron en ratones a unas hembras que cuidaban de manera esmerada o “cariñosa” a sus crías y otras que no.

Los hijos de las madres “más cariñosas” desarrollaron a futuro una mejor respuesta frente al estrés que los de las madres “más descuidadas”, aun cuando su secuencia de ADN era la misma en todos los individuos.

Pero esto no termina ahí, algunos hijos de las ratas desapegadas fueron puestos apenas nacidos bajo el cuidado de las más atentas. Se descubrió que los ratones de madres poco cariñosas pero criados por madres cariñosas tenían las mismas respuestas al estrés que los hijos de madres cariñosas. Esto fue porque el ambiente había producido un cambio en la forma en la se expresa la información genética.

Es decir, que además de que el ambiente produce marcas que determinan diferentes formas de expresión de nuestros genes, se comprobó que esos cambios epigenéticos son reversibles. Todo depende de la calidad de la interacción entre el individuo y su ambiente.

 

¿Qué se entiende por ambiente?

Todas estas marcas en nuestro ADN vienen dadas por los factores a los que las personas se exponen desde pequeños, incluso antes de nacer. El estrés, la alimentación, los rayos UV, los fármacos, las drogas, el alcohol, el tabaco, el cuidado materno, las relaciones interpersonales, la actitud frente a la vida y otros indicadores forman parte de ese ambiente que determina la expresión de nuestra secuencia genética.

Otro estudio sobre el tema evaluó el comportamiento de niños nacidos de madres que habían presenciado el atentado de 2001 en Nueva York durante el embarazo con el de chicos nacidos de mamás no expuestas a ese trauma. Se pudo determinar que los primeros eran más asustadizos frente a extraños o ruidos fuertes. Esto sugiere que los eventos traumáticos percibidos por la madre gestante pueden afectar al individuo en desarrollo.

Comprobaciones semejantes sobre el estrés prenatal se realizaron también en ratones. Otras investigaciones observaron cómo gemelos idénticos, a pesar de compartir igual secuencia de ADN, desarrollan una predisposición muy distinta a contraer cierto tipo de enfermedades.

La epigenética pone de manifiesto cómo todo lo que damos a las personas, en especial a los niños, influye incluso en la expresión de sus genes y puede ser determinante para su vida.

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