Guardar los recuerdos en fotografías es una buena manera de conservar para siempre muchas de las cosas que nuestra mente no puede recordar. Poder recorrer en imágenes nuestra historia nos conecta con quienes somos y con todo lo que nos llevó a estar hoy donde estamos.
No podemos recordar cada cosa que nos pasa. Nuestra memoria conserva sólo algunos de los momentos que vivimos. Pero hay una excelente manera de perpetuar esos recuerdos de nuestra vida: las fotografías.
Tomar una foto es mucho más que un simple acto de registro para compartir en el momento, es un reservorio de memoria para los años que vendrán, que nos permitirá volver una y otra vez a esos momentos que nos construyeron como personas.
En el caso de la infancia es una herramienta fundamental para crear nuestros recuerdos ya que hasta los 3 o 4 años no comenzamos a generarlos de manera clara y precisa. Las fotos (y videos) serán la manera de grabar estos momentos en la memoria y conservarlos por toda la vida.
¿Por qué es importante guardar recuerdos en fotografías?
El contar con un registro del pasado nos ayuda a estructurar nuestra memoria y nos permite volver a él cada vez que lo deseemos o lo necesitemos.
Lo que vemos allí es nuestra historia, eso que somos, lo que nos construyó como personas, es por ello que son una manera de reafirmar nuestra identidad. Es un modo de conectarnos con nuestras raíces.
Las fotografías permiten también fortalecer relaciones al poder recordar a las personas que nos acompañaron en los momentos importantes de nuestra vida.
Poder recorrer los instantes más preciados de nuestra historia puede ser un bálsamo que mejore nuestro estado de ánimo. Es la posibilidad de revisar lo bueno de nuestra vida y hasta puede ser un ejercicio para relajarnos y reflexionar.
Para los niños es un momento de mucho disfrute que les permite conocerse desde que nacieron y conocer el pasado de la familia.
Algunos consejos para atesorar nuestros recuerdos
Para los niños (y para los adultos también) será un muy buen recuerdo contar con fotografías de sus primeros días y hasta de su estancia en la “panza de mamá”. Así que guardar ecografías y las primeras fotos del bebé serán una muy buena medida.
Lo mejor será que cada niño tenga sus propios recuerdos. Si bien en la mayoría de los casos el esmero y la rigurosidad en registrar y organizar las memorias de los niños se pierde al pasar el primer o segundo hijo, vale la pena poner esfuerzo en generar a cada uno su propio compendio (material o digital). Para todos será un momento agradable poder mirar atrás y conocer parte de su historia.
Más allá de la importancia de contar con registros del crecimiento de nuestros hijos, lo que no podemos permitirnos es perdernos el disfrute de los buenos momentos por estar detrás de la cámara. Dejemos lugar para que estos recuerdos se graben también en nuestra memoria y en nuestro corazón.
Hoy tenemos una gran aliada para conservar todas nuestras fotografías: la tecnología. Las opciones son variadas, desde pendrive y discos externos hasta guardarlos en la nube. Pero también valdrá la pena tener un álbum “físico” para poder hojear.
Tan importante como tomarlas, es organizarlas
Para que las fotos cumplan bien su función de compendio de nuestra memoria, es muy importante tener el archivo organizado. Si las imprimimos, un álbum será una buena opción. Tomarnos el momento de ordenar las fotos cronológicamente o por evento podrá ayudarnos a organizar la información. Si queremos ir un poquito más allá podremos escribir detrás de cada foto fecha, lugar, acontecimiento o algún otro dato importante.
Con las fotos que guardamos de manera digital debemos también procurar mantener este orden. Si tenemos fotos sueltas en distintas carpetas de la computadora o en diversos dispositivos es más probable que mucha información se nos pase por alto.
Lo mejor será ir organizándolas de a poco. Si volvemos de un viaje, recopilar nuestras fotos y las que hayan tomado quienes nos acompañaron y guardarlas juntas en un dispositivo designado y en una carpeta identificada por ejemplo con el nombre del lugar visitado y la fecha. Generarnos una forma de organizar nuestras fotos nos permitirá encontrarlas con más facilidad.
Mirar fotos es una de las actividades más lindas para hacer así que a tomar la cámara y comenzar a construir las memorias que recorreremos en el futuro.